Guía completa: Cómo cultivar betabel con semillas en tu jardín
El betabel (también conocido como remolacha) es un cultivo fácil de manejar, nutritivo y perfecto tanto para jardineros principiantes como experimentados. Su versatilidad y beneficios lo convierten en un excelente complemento para cualquier huerto. Si te preguntas cómo cultivar betabel desde semillas, ¡aquí tienes una guía paso a paso para que puedas disfrutar de esta increíble hortaliza en tu jardín!
1. Elección de las semillas
El primer paso es seleccionar buenas semillas de betabel. Existen diversas variedades, como el betabel rojo tradicional, el amarillo o el betabel "Chioggia", famoso por sus anillos de colores. Asegúrate de elegir la variedad que más te guste y que se adapte bien al clima de tu zona. Puedes encontrar varias opciones en nuestra tienda de semillas online.
2. Preparación del suelo
El betabel necesita un suelo bien drenado, fértil y con un pH ligeramente alcalino o neutro (entre 6.0 y 7.5). Antes de plantar, prepara el terreno aflojando la tierra hasta unos 30 cm de profundidad y eliminando piedras o raíces que puedan dificultar el crecimiento de la raíz del betabel. Los suelos arcillosos no le sientan nada bien, además debe ser un suelo rico en nutrientes pero sin abusar.
Necesita especialmente potasio, podemos añadir ceniza aparte de humus de lombriz le vendrá muy bien para formar la raíz. Puedes consultar los sustratos y abonos que manejamos en nuestra tienda online.
El betabel normalmente se cultiva a pleno sol, pero es un cultivo que acepta semisombra así que si tienes semi sombra en el huerto puedes aprovechar para poner betabel.
3. Cuándo sembrar las semillas
El betabel prefiere climas frescos. La mejor época para sembrar es a inicios de la primavera o al final del verano y otoño, dependiendo de tu ubicación. Las semillas se pueden sembrar directamente en el jardín o en macetas profundas, ya que esta hortaliza se desarrolla mejor en exteriores.
4. Cómo sembrar
Siembra las semillas directamente en el suelo a una profundidad de 1-2 cm.
Deja entre 5 y 10 cm de espacio entre cada semilla para darles suficiente espacio para crecer.
Mantén las hileras a unos 30 - 40 cm de distancia entre sí.
Dato curioso: Cada "semilla" de betabel es en realidad un pequeño grupo de semillas, lo que significa que podrías ver varios brotes a partir de una sola. Esto requerirá un proceso de aclareo más adelante.
5. Riego y cuidados
El betabel necesita un riego regular, especialmente durante la germinación. Mantén el suelo húmedo, pero no encharcado. Un buen drenaje es esencial para prevenir la pudrición de las raíces.
Riego: Riega profundamente una vez por semana, o más seguido si el clima es muy seco. Fíjate sobre todo en que no se seque el suelo e intenta conseguir esa humedad lo mas constante posible para que no se pudra la raíz por exceso de agua o se raje por falta.
Aclareo: Una vez que los brotes alcancen unos 5 cm de altura, retira los más débiles para dejar espacio a las plantas más fuertes.
Fertilización: Aunque no es un cultivo extremadamente exigente, puedes fertilizar con compost o abono orgánico cada 4-6 semanas para asegurar un buen crecimiento.
6. Control de plagas y enfermedades
Las plagas comunes que afectan al betabel incluyen pulgones, gusanos de la raíz y minadores de hojas. Puedes controlar estas plagas con métodos naturales como insecticidas ecológicos o usando plantas compañeras que ahuyenten los insectos.
Enfermedades comunes: Mantén una buena circulación de aire y evita encharcamientos para prevenir problemas de hongos como la pudrición de la raíz.
7. Cosecha
El betabel está listo para ser cosechado entre 8 y 12 semanas después de la siembra, cuando las raíces tienen entre 5 y 7 cm de diámetro. No esperes demasiado, ya que las raíces más grandes pueden volverse duras o amargas. Además de las raíces, puedes disfrutar de las hojas jóvenes en ensaladas o salteadas.
8. Consejos adicionales
Para una cosecha continua, siembra en diferentes fases, espaciando las plantaciones cada 2 o 3 semanas.
Si prefieres hojas más tiernas, también puedes cultivar betabel solo por sus hojas, que son comestibles y muy nutritivas.
Cultivar betabel a partir de semillas es un proceso sencillo que, con los cuidados adecuados, te permitirá disfrutar de una deliciosa y nutritiva hortaliza en tu hogar. Ya sea que lo uses para ensaladas, jugos o como guarnición, el betabel será un excelente aliado para tu salud.
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